jueves, 8 de octubre de 2009

Nos acompañan los muertos


Evidentes o escondidos. Asumidos o negados. Como un suspiro disimulado, o como un tatuaje. Me acompañan mis muertos. Allí están ellos, entre mis efectos personales junto a mi infancia, la escuela, mis miedos y mis sueños.
En ocasiones los puedo encontrar en ese mundo paralelo en el que la lluvia, el olor de su perfume me los trae de regreso. Otras veces los sueño. Y me sonríen. Siempre me sonríen.